Le ocurrió al claromequense Juan Peralta.
El vecino Juan Peralta fue víctima de un intento de estafa. Ocurrió este sábado al mediodía. Juan había publicado la venta de una mesa, y dio como contacto su teléfono. Una persona se comunicó interesada en concretar la compra y así se lo hizo saber. Como suele suceder en este tipo de operaciones, Peralta le dio a la persona un número de cuenta para que efectúe el correspondiente depósito y se concrete la venta.
Pero eso nunca ocurrió. Sin embargo, el supuesto comprador insistía en que había realizado la transferencia. Quería que Peralta concurriese a un banco o un cajero para aprobar la «trasferencia». Esta insistencia, lo hizo sospechar.
Juan dijo a la RCC que «me dijeron que habían realizado la transferencia, pero ésta nunca ingresó a mi cuenta».
Agregó luego que «me insistían con que tenía que ir al cajero para aprobar la transferencia. Para que su cuenta pueda seguir operando». Le dijeron que la cuenta no podía seguir operando hasta tanto Juan hiciese dicha maniobra de aprobar la transferencia. Cosa que no ocurre en la realidad.
Ante la insistencia, Peralta comenzó a sospechar de la actitud del falso comprador. Ahí directamente, esta persona comenzó a insultarlo y a amenazarlo con denuncias. Esto es claramente parte de la puesta en escena, se «indigna» el que pretende realizar la estafa, con la intención de no levantar sospechas. En este caso ocurrió lo contrario, ya que Peralta comenzó a sospechar justamente ante la insistencia para que concurriese al cajero.
Tras cortar la comunicación y advertir el intento de estafa, Peralta concurrió a la Comisaría para efectuar la denuncia. Pero la operación en realidad nunca se concretó, fue un intento de estafa. Es decir, no hubo delito. No obstante, el vecino compartió su experiencia y las capturas de pantalla de la conversación con el fin de advertir a la población sobre este tipo de maniobras.
