El gran ganador del 2020.
Todavía se conserva la imagen en la retina. Carlos Alzogaray recibiendo una ovación única en el podio de Las 24 Horas de la Corvina Negra. Con su humildad y sencillez conquistó a todos. El representante de la Banda de los Pomelos regresó a Claromecó para este concurso. Lo hizo a bordo de la camioneta que se ganó en 2020, que a su vez se la vendió a un pariente suyo que lo acompañó. Vino con casi todo el grupo con que llegó la primera vez.
Y obviamente, habló con la RCC. En La Casa de la Carnada, donde pasó a saludar, charló un rato con la radio. Muy emocionado, por momentos no pudo seguir hablando, Carlos Alzogaray expresó que «es una emoción volver acá. Por todas las cosas que viví, por fin llegamos después de un largo viaje«.
Nunca voy a olvidar el cariño de la gente
Agregó Carlos que «fue una experiencia única, estoy eternamente agradecido a toda la gente de acá. Tenía muchas ganas de volver. Yo vengo de Mendoza viajando desde el miércoles, llegué ayer a Neuquén donde descansé un par de horas. Ahora lo que queda es disfrutar de este lugar, y del cariño de la gente, que es algo que nunca me voy a olvidar. Y mandarle un saludo a todos los pescadores de esta zona, lo mío fue solamente suerte. Yo vine con la intención de disfrutar».
Alzogaray recordó todo lo que vivió en aquel 2020 cuando se consagró. Dijo que «yo vine con una caña de 240, porque no imaginábamos que acá se usaban cañas de 4 metros. Tuvimos que comprar una, y mi cuñado intentaba lanzar y se le caía el plomo ahí nomás, todavía tengo el video. Cuando yo tiraba se me caía cruzada, y la tenía que dejar ahí para no enganchar a los otros pescadores«.
Agregó que «cuando picó también había tirado ahí cerca. Lo primero que hice fue mirar a los costados para ver si no traía a alguno enganchado. La traje fácil, no sabía que era una negra. Después vino un pescador que estaba al lado, y ahí me avisó que era una negra. Me dijo «loco, ganaste el concurso«.
Videos en YouTube
El pescador salteño que vive en Mendoza agregó que «tuvimos que mirar videos en Youtube para ver cómo se pescaba una corvina, porque no sabíamos. Veíamos que se demoraba en sacarla. Nunca pensé que en 20 metros me iba a tironear y menos que era una corvina negra. Ahora sé que la carnada era un langostino, en ese momento dije que era un cosito rosado».
Asesorado por la RCC
Alzogaray recordó cómo fue la travesía que tuvo que pasar hasta llegar a Claromecó en 2020. Cuando se inscribió en el Cazadores, se cruzó hasta el Estudio Móvil de la radio para pedir ayuda y asesoramiento. Recordó que «fue Fernando Catalano el que me dijo del langostino. Ya tuvimos problemas antes de empezar el viaje, me decidí a último momento a salir, no había pasajes en ninguna empresa. Estaba en la terminal, y vino la boletera de Andesmar porque había una señora que terminaba de suspender un pasaje. Lo tomé, cuando el micro ya estaba parado en la plataforma».
Agregó que «había recién salido del trabajo, no había comido, tenía un hambre bárbaro. Le pregunté a la azafata en qué terminal paraba para poder comprar algo para comer. Me dijo que no paraba porque era servicio ejecutivo, sirvieron la cena a las 11 de la noche. A la mañana llegué a Neuquén, me estaba esperando mi cuñado. Armamos todo para salir a las 8 de la noche, y ahí se nos rompió la válvula de gas del auto. Tardamos otras tres horas en arreglarlo».
Durante el viaje «el GPS nos hizo perder otra hora más, 13 horas de viaje. Cuando llegué acá me quería inscribir y me faltaban 100 pesos para completar la inscripción, me había pasado de gastos en el viaje, mi hermano me tuvo que prestar el dinero. Vine sin ganas por todas las cosas que me habían pasado. Veníamos por pescar y compartir, que es lo que rescato, la gran amistad que hice con mucha gente. Con esa intención volví».
También dijo entre risas que «esta vez no vino el dueño del Corsa, porque no le dieron permiso«. El sueño de Carlos era traer a su mamá y mostrarle el sector de la Virgencita, donde extrajo la corvina ganadora. Afirmó que por la pandemia decidió no traerla, aguardando a que la situación mejore en el futuro.
Inscripciones
Por otra parte, el móvil de la RCC estuvo en el Club Cazadores, donde ya se recepcionan inscripciones, y hay pescadores consultando. Uno de los que llegó fue el mendocino Ernesto Aveiro con su Ford Taunus, que todos los años promociona el concurso en su provincia. El hombre llegó con su vehículo a la sede de Cazadores.
