El intendente Carlos Sánchez estuvo llegó este viernes a la localidad. Estuvo acompañado por el secretario de Desarrollo Económico Matías Fuhrer, el director de Turismo Francisco Aramberri y el director del Organismo Descentralizado Julián Lamberti.
En la Costanera, las autoridades recorrieron el lugar del ex Parador La Barra, la obra del nuevo Samoa, y Borneo. En este último balneario se analizó la zonificación del lugar, y medidas a tomar próximamente al respecto.

El intendente observó los trabajos que se realizan en el Centro de Jubilados, que se encuentra ampliando sus instalaciones. Llegaron para tal fin ladrillos de la bloquera municipal. Fue recibido por el presidente de la entidad Jorge Rasmussen.
En el Centro de Jubilados
Museo, Secundario y Biblioteca
También estuvieron las autoridades en el Museo Regional Claromecó Aníbal Paz. Sánchez dialogó con el encargado del museo Rolando Flórez. Hablaron sobre el nuevo edificio de la institución, que prosigue con la obra de calle 11 entre 30 y 32. Sánchez entregó un nuevo aporte para tal fin. Con subsidios municipales, este año se decidió terminar la primera etapa de la nueva estructura.

La comitiva se dirigió luego al nuevo SUM del Instituto Secundario. Allí fueron recibidos por Laura y Andrea Castro, integrantes de ACEC. El intendente entregó un nuevo subsidio por dos millones de pesos para avanzar con la obra.
En la Biblioteca Popular Dr. Bernardo Houssay Sánchez fue recibido por Ana Linda Fuente y Vanesa Acosta, integrantes de la Comisión Directiva. También por la bibliotecaria Paula Ávila y la asistente Inés Martín. Recorrió la obra de pintura que se está realizando con aportes municipales. Entregó también un cheque con el aporte mensual que la Municipalidad efectúa a las bibliotecas populares.

Las autoridades recorrieron también las obras de cordón cuneta que se están haciendo con personal del Organismo Descentralizado.

La Barra
El intendente hizo referencia a la demolición del ex Parador La Barra. Sostuvo que «hubo dos motivos fundamentales, uno que se venció la concesión. Y segundo, el edificio estaba irreparable. El aire del mar, el salitre, la arena, y estas cuestiones, hicieron que el edificio estaba obsoleto. Los antiguos dueños sacaron lo que pudieron y les permitía la ley. Nosotros con el Municipio lo evaluamos con técnicos, era un edificio que estaba en muy malas condiciones, no se podía hacer nada. Entonces la decisión fue demolerlo».
Sánchez destacó además que se está trabajando con los paradores. Dijo que «en algunos casos han vencido los contratos, algunos han querido continuar, otros no. La idea es re licitar, eso está en el Concejo Deliberante. Un trabajo arduo que venimos haciendo hace dos o tres años. Queremos que los proyectos sean viables y sustentables. Samoa ya empezó con el nuevo proyecto, varias veces nos llamó para empezar con la obra».